miércoles, 15 de enero de 2014

NUEVO AÑO

Uf!!!! Cuántos días sin comunicarme en esta ventanita mía que es el blog.
¡Se acabó 2013! ¡Por fin!
Pasaron las navidades, ¡bien!, vale ya de comer a todas horas.
En nochevieja estuve en la nieve, incluso hice una excursión con raquetas, ¡estoy hecha una campeona!.Verdaderamente me sentí bien y eso a pesar de la niebla que nos fastidió un poquito.
 Por la tarde, invité a mi familia y amigos a hacer un pequeño rito de despedida del año. Quería hacer algo diferente, tirar cosas que me sobraban, comenzar una nueva senda sin pesos en la mochila. Preparé unas tarjetas y sobres de colores donde cada uno teníamos que escribir todo aquello del 2013 que quisiéramos que desapareciera, que no estuviera, que no volviera a ocurrir. Era privado y el objetivo era quemarlo antes de las 12 de la  noche.
Así lo hicimos, la sensación fue buena, de vaciado de lo inútil.
Y ha comenzado el 2014, seguro que es mejor y además sus cifras suman 7, mi número preferido.
El día 9 ¡FIN DE LA RADIOTERAPIA!!, ahora sí que he terminado...Comienza el momento de mi verdadera recuperación.
Me citarán a visita en 6 semanas, puro trámite. He terminado con la piel fenomenal, ni se nota que me han radiado, las cremas que me he puesto han funcionado fenomenal. Recuerdo que estuve durante meses antes de empezar dándome una mezcla de aloe vera y aceite de germen del trigo y durante el tratamiento SATIVA M-TEX y la crema reparadora natural de ESENZIS.
Al salir nos fuimos a comer Mariví, Mamen, Jesús y yo al vegetariano, ¡qué rato y qué comida más agradable!
Aunque no os lo creais, no paro en todo el día, bueno, en toda la mañana, por la tarde suelo estar más tranquila por casa, eso sí,  no echo de menos nada el hospital.
Ayer me fui a andar con Mamen, 10 km. dice ella que hicimos, ¡campeonas totales!
Me encuentro bastante bien, siguen los dolores musculares pero el tiempo no acompaña mucho y los voy controlando con mis remedios. Creo que pronto me plantearé empezar de nuevo la gimnasia de la espalda pues lo que peor llevo son las lumbares.
Me siento con muchas ganas de hacer cosas, de comenzar una nueva experiencia de vida sin el hospital como segunda casa, de conseguir comenzar de nuevo  pasito a pasito.
No quiero correr ni atropellarme, calma, presente, disfrutar del momento, ...
Todos estos meses, mientras estás ocupada en tu curación, ella lo ocupa TODO. No hay sitio para mucho más, salvo la familia, claro.
Ahora se abren nuevas posibilidades y  mi sensación es de comienzo.
Me siento distinta por muchas cosas, no tengo la necesidad de recuperar lo anterior, quiero empezar nuevos caminos.
En marzo tengo revisión con la oncóloga con analíticas. En ese momento hará 1 año del comienzo de mi experiencia, donde me dieron la primera noticia. ¡Poco imaginaba todo lo que iba a ocurrir! Vuelvo a repetir, cosas malas y para olvidar pero también aprendizajes y experiencias maravillosas.
En una próxima entrada os contaré despacio todo lo que me ha dado el cáncer, lo que me llevo, lo que le tengo que agradecer.