viernes, 14 de febrero de 2014

EL PODER DE LAS MUJERES ES IMBATIBLE

Lo creía antes y lo creo ahora mucho más firmemente.
Durante todo mi camino he estado rodeada fundamentalmente de ellas, de mujeres maravillosas.
 La energía de todas ellas ha cargado mis baterías en todos los momentos, los buenos y los malos.
Algunas han estado muy cerca física y emocionalmente y otras las he sentido al ladito y han compartido conmigo su ternura, sus wasap, sus mensajes, sus llamadas.
Cada una ha entregado lo mejor que ha tenido y ha podido.
TODAS os habéis convertido en MIS AMARILLAS.
A Mamen y Mariví, ya casi las conocéis. Pero hay muchas más.
Mariola, viniste la noche del diagnóstico con Mamen simplemente a estar conmigo y a darme tu opinión profesional. Te armaste de valor cuando tocó hacer de peluquera y compartimos el duro momento de rapar la cabeza, la agradable cenita de después, mi primera imagen con pañuelo y la noche de compañía para que no me quedara sola. ¿Qué te puedo decir?
Carmen, mi llorona personal y Bego, desmontasteis los cajones para traerme vuestros pañuelos, siempre dispuestas para todo y más. ¡Qué abuelaza vas a ser! Os quiero.
Pili y Celia pendientes de mí. Siempre con palabras de ánimo y de coraje.
Mª Fran, mi prima querida, nos hemos vuelto a acercar como cuando éramos niñas, las dos sabemos que nos queremos.
Maite, sus flores, sus mensajes, su optimismo, sus piropos...ya sabes lo que te quiero.
Mercedes, su calma y sus palabras me han tranquilizado.
Ángela que con su experiencia y su fuerza me ha ayudado a mirar esto de otra forma.
Teresa y Rosabel, con sus llamadas, os he sentido conmigo.
Mª Cruz y Pilar, ¡cuántas emociones recuperadas!.
Pepa, mi tata, sé lo preocupada que has estado y tú sabes lo que me has enseñado para poder con esto.
Mi Paula y mi Leyre, mis princesas, mis niñas, mi energía permanente, por ellas TODO.
Bea, serás una mujer impresionante. Me haces sentir maestra (¡qué bonita palabra!).
Paz, Inma, ¡cómo me habéis cuidado!. Virtualmente y físicamente. A mí y a mis niñas, siempre pendientes y dispuestas a todo lo que hacía falta. ¡Qué buena compañía en el pueblo!
Pilar, la madre de Jesús, aquí al pie de batalla cada vez que la hemos necesitado. Gracias por tu entrega y tu dedicación.
Y, por supuesto, mi mami, ella se derrumbó y desde sus trocitos todavía me animaba e intentaba creerse que estaba bien. ¡Cuánto sufrimiento para ella! Pero, todo ha salido bien, mama, te lo dije. Tu hija iba a poder con el bicho.
Me encanta esta canción: POR VOSOTRAS, AMIGAS!!

HAY MUJERES (Joaquín Sabina)
Hay mujeres que arrastran maletas cargadas de lluvia, 
hay mujeres que nunca reciben postales de amor, 
hay mujeres que sueñan con trenes llenos de soldados, 
hay mujeres que dicen que si cuando dicen que no, 

hay mujeres que bailan desnudas en cárceles de oro, 
hay mujeres que buscan deseo y encuentran piedad, 
hay mujeres atadas de manos y pies al olvido, 
hay mujeres que huyen perseguidas por su soledad. 
Hay mujeres veneno mujeres imán, 
hay mujeres de fuego y helado metal, 
hay mujeres consuelo, hay mujeres consuelo, 
hay mujeres consuelo mujeres fatal. 
Hay mujeres que tocan y curan, que besan y matan, 
Hay mujeres que ni cuando mienten dicen la verdad, 
Hay mujeres que explotan secretas de estancias del alma, 
Hay mujeres que empiezan la guerra firmando la paz. 

Hay mujeres envueltas en pieles sin cuerpo debajo, 
hay mujeres que en sus caderas no se pone el sol, 
hay mujeres que van al amor como van al trabajo, 
hay mujeres capases de hacerme perder la razón. 
Hay mujeres veneno mujeres imán, 
hay mujeres de fuego y helado metal, 
hay mujeres consuelo, hay mujeres consuelo, 
hay mujeres consuelo mujeres fatal. 
Hay mujeres veneno mujeres imán, 
hay mujeres de fuego y helado metal, 
hay mujeres consuelo, hay mujeres consuelo, 
hay mujeres consuelo mujeres fatal.



1 comentario:

  1. Pues sí Pilar, a mi las emociones se me salen por los ojos y soy lloroncica, que le voy a hacer. Pero que conste que en todo este proceso tuyo, tú solo me has visto llorar en los momentos de feliz emotividad, de los de reír y llorar a la par!!!

    Me gustó mucho cuando me acompañaste al médico el otro día, ya ves que la normalidad de las vida hace que sean tus amigas las que cuentan contigo también para estas cosas.... Que bueno, no?

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